martes, 27 de enero de 2015

Nos manipulan.

El Tucán y su Escribano

Para empezar deseamos poner en claro no somos analistas políticos, mucho menos periodistas y distamos de ser expertos en materia de inteligencia, nuestra escuela es “la escuela de la vida” fuimos “amasados” por los consejos de nuestros padres y muchas otras personas a las cuales estimamos mucho aunque algunos partieron prematuramente, esas cosas y la vida misma formaron nuestro carácter, se nos inculco el método de usar la materia gris protegida por nuestro cráneo, no encarcelada en el mismo para ver, analizar y comprender las cosas, por eso al escribir para ustedes nos la pasamos horas enteras leyendo la prensa mundial en diversos idiomas y desde diversas perspectivas políticas, aprendimos en nuestra “alma mater” a no rendirnos ante los obstáculos, es más aprendimos a superar los mismos con los escasos recursos existentes, eso nos diferencia de muchos que ayer eran “comunistas de primera fila” y hoy abrazan apasionadamente las ideas conservadoras, se han acomodado al sistema! O quizás, lo más probable, jamás fueron revolucionarios.

Se que mi opinión no puede ser del agrado de muchos, a diferencia de muchos de aquellos que se ubican en el bando de las izquierdas, busco la convergencia de todos aquellos que desean un mundo mejor, no me gustan los radicalismos porque los mismos suelen turbar la mente y esto llena los corazones de odios muchas veces inexplicables,esto que no confunda a nadie, tecnológicamente no hemos dado un solo paso atrás,ni pretendemos darlo, ya que la convicción de que es posible construir un “mundo nuevo” prevalece en nosotros y solo las ideologías políticas que eliminen las injusticias sociales, económicas y étnicas puede ser la base del mismo.

Hoy apelamos a ustedes porque creemos necesario llamarles la atención, creemos tener el derecho de hacerlo, nuestro país esta sumergido en una seria crisis y temo que al emerger nuestro despertar colectivo sera traumatice,producto de nuestra poca voluntad de analizar y buscar salidas, porque sucede esto? Porque somos victimas de la manipulación global por medio de la llamada prensa libre que difunde sus noticias del tal manera que la mayoría de nosotros solo percibe el mensaje subliminal que estas desean, si!estamos siendo manipulados. La sociedad global enfrenta a casi 70 años del triunfo sobre la Alemania de Hitler un peligro latente de guerra global, la misma no sera como nos dicen sus promotores un conflicto de corta duración y de “daños limitados” , no lo puede ser porque la acumulación de armas de exterminio masivo es enorme, eso no hay que olvidarlo. Leyendo la prensa global en el día de hoy veo que un tipo nada simpático como G.M. Le Pen el jefe de los fachos franceses dice: “Charlie Hebdo fue una conspiración de los servicios secretos de Israel, Francia y los EE.UU, con el fin de desatar una guerra entre el occidente y el islamismo” Le Pen no es amante de la democracia su discurso es reaccionario y racista, pero considerarlo un loco es peligroso, ya que el es un político experimentado y recordemos el diablo no es diablo por lo malo sino por lo viejo que es; pero también hay otra noticia que nos inquieta, David Crowley fue hallado muerto con su esposa e hija de 5 años en su casa en Appple Valley el pasado 19 de enero, quién fue David Crowley? veterano del ejército, documentalista critico contra el sistema de los EE.UU. su película Gray State (ver en You Tube) denuncia los abusos de los órganos policiales y de seguridad en los EE.UU denuncia que la unidad FEMA lleva a los opositores o disidentes del sistema a campos de concentración; se nos dice que fue suicidio; esta noticia nos mueve a recordar el caso de Phillipp Marshall también veterano del ejército encontrado muerto con sus hijos y perros ( 2013)también suicidio según los medios oficiales, quien fue ese autor de diversas publicaciones que denunciaban las malignas prácticas del gobierno de los EE.UU en su libro False Flag denuncia la conspiración de Bush y Cheney con los sauditas para crear el 11 de septiembre y así tener una justificación de los actos posteriores que todos conocemos, Afganistán e Irak.

Marshall ex agente de la CIA había descubierto aparentemente que su vida había sido un “enorme engaño” y denunciaba el mismo en sus libros, el ex oficial de la NSA Wayne Madesen dijo que tras haber investigado una semana las huellas en la casa de Marshall el llego a la conclusión de fue asesinado en el marco de una operación oscura! Estos casos los citamos porque diversos periodistas denuncian que entorno a Ucrania los círculos de la OTAN les dicen que pueden y que no deben decir o publicar tanto así que el consejo de la TV estatal alemana critico a ambas empresas de radiodifusión por sus reportajes e informes sobre Ucrania diciéndoles que su forma de difundir noticias se ha convertido en propaganda!

Varios medios de prensa checos y eslovacos menos conocidos o de menor tiraje y cobertura iniciaron hace unas semanas una campaña llamando a los jóvenes y hombres en edad del servicio militar a que pidan, constitucionalmente es permitido, ser relevados de los mismos, ahora hace una semana instan a estos grupos a hacerlo antes que termine el presente mes! Ya que según los medios después sera tarde! Entre las noticias menos importantes de la prensa libre se mezcla una nota marginal, en los próximos días el jefe del ejército de tierra de los EE.UU visitara Ucrania para ilustrarse sobre la situación y dar sus recomendaciones para una posible “ayuda”, esto es grave ya que de hecho el jefe de uno de los componentes armados de un país no vecino con Rusia del peso de los EE.UU se acerca a un escenario de guerra en cercanías a las fronteras rusas.

Aprendimos que una guerra no surge como por arte de magia, al contrario las mismas son según von Clausewitz (1780-1831), la continuación de la política con otros medios, presentándonos “causas” para desatar las mismas motivos religiosos, étnicos, culturales etc y etc, pero veamos que nos dice Marx sobre estos conflictos “En todos los grandes centros industriales de Inglaterra existe un profundo antagonismo entre el proletario inglés y el irlandés. El obrero medio inglés odia al irlandés, al que considera como un rival que hace que bajen los salarios y el nivel de vida. Siente una antipatía nacional y religiosa hacia él. Lo mira casi como a los pobres blancos [poor whites] de los Estados meridionales de Norteamérica miraban a los esclavos negros. La burguesía fomenta y conserva artificialmente este antagonismo entre los proletarios dentro de la misma Inglaterra. Sabe que en esta escisión del proletariado reside el auténtico secreto del mantenimiento de su poderío”. Este citado prueba a nuestro juicio lo que tratamos de explicar, no existe realmente un enemigo “islamita” “ruso” ambos son creaciones para justificar un método de actuar hoy producto de la velocidad de las noticias manipuladas surge este “enemigo” en cualquier rincón de la tierra siempre y cuando necesitemos una causa para agredir , invadir u ocupar en verdad las personas que se nos presentan como enemigos a muerte tienen las mismas preocupaciones que nosotros y solo desean tener un porvenir seguro.

Somos consciente de que este aporte se extiende mucho más allá de lo que un periódico impreso desea publicar pero la gravedad de la situación me obliga a tratar de explicar y advertir, porque como decíamos nos estorba el simplismo con que algunos desean ver y analizar las cosas; toda guerra de la sociedad moderna es una guerra con intereses económicos dígase o no, el capitalismo como sistema jamás comenzara una guerra para liberar a nadie, le importa la libertad de expresión tanto como los derechos humanos; por eso vemos que Obama dice estar saliendo de la crisis, están apurados en insinuar mejorías, el desplome es evidente e inevitable la economía global del capitalismo no se esta recobrando al contrario; vean Rusia en crisis producto del bloqueo eso nos dicen, ¿porque entonces nos esconde que Rusia y no solo ella están comprando por medio de sus bancos centrales enormes cantidades de oro? en el trimestre pasado fueron negociados a nivel mundial 93 toneladas de estas 55 toneladas ! fueron a parar en el banco central ruso, lo mismo hace la China, y otros aliados potenciales de Rusia, con que si no tienen dinero y están quebrando? Pero más importante es, por qué? Diversos países capitalistas occidentales están “repatriando” sus reservas de oro depositadas en los Estados Unidos,Austria, Holanda y hasta Alemania, porque? Observamos nuevamente una subida a niveles récord de los indices de las bolsas de valores estas subidas son artificiales, incoherentes al estado real de la economía, aquí recuerdo: mientras más alto trepa el mono con mayor claridad se le vera el trasero, mi abuela solía usar otra palabra, y mayor sera el impacto al caer, también Rusia esta vendiendo los papeles estatales de los EE.UU en su poder, será que Putin teme tener que utilizar los mismos para hacer fuego? En un futuro inmediato? Como vemos la guerra financiera esta en plena marcha.

Pero desatar este conflicto no es tan fácil como se cree por ende utilizan los conservadores su retorica demagógica, Poroschenko dice que para detener a Rusia el necesita un ejército de varios cientos de de miles de hombres, y advierte que la primera linea de defensa europea es Ucrania! igualmente los neo conservadores por medio de una retorica demagógica y revisionista nos están dando “lecciones” de historia contemporánea no el Ejército Rojo sino el Ejército ucraniano libero a parte de Polonia esto es una falsificación de la historia demás esta decir que es burda y grosera,estos es provocar con el fin de producir un estallido. Verán somos necios y no sabemos porque tenemos que buscar las respuestas a nuestras interrogantes a solas, ustedes que hacen?mientras esperan que alguien les de las respuestas ¿Siguen consumiendo la basura “enlatada” que les venden los medios? Entonces es tiempo de que comprendan: las mil y unas preguntas “nacionales” tienen sus respuestas o partes de las mismas en interrogantes internacionales: quién trata de acallar a medios y periodistas independientes? Quien manipula la verdad en torno al avión malasio?quien hostiga y provoca esta histeria anti musulmana? Quien teje tenebrosas redes entorno a nuestra América? Quien manipula descaradamente las bolsas de valores? Cuando encuentren las respuestas verán que parte de las mismas nos darán una respuesta a la conducta del sr. Martinelli y su camarilla, entenderán mejor porque el sr. Varela negocia con el Comando Sur bajo el manto de una ayuda humanitaria, pero esas respuestas las tenemos que buscar, no esperarlas, para eso hay que dejar el simplismo y pasar de lo sencillo a lo complejo, sencillas son las respuestas si las sometemos a un análisis complejo y serio ,no ver lo que dicen que estamos viendo o escuchando sino emplear la materia gris en el cráneo para interpretar lo visto y escuchado; el Tucán lo explica de una manera más simple: si tu vecino te regala frutas diciendo estas ricas uvas las acabo de cosechar de mi huerto, pruébalas y determina tu mismo si son ricas o no, pero recuerda que el en su huerto, y tu los vistes, solo sembró mangos y estos por lo general no se comen de un solo bocado sino pedazo a pedazo, hasta llegar a la semilla, porque si te la tragas de seguro no te enverara pero si obstruirá uno de tus “canales” y eso puede ser mortal, nos están manipulando a eso hay que darle contra con toda las emociones y pasiones del intelecto , pero sin pasiones y emociones personales, porque la verdad es coja y casi siempre viene atrás pero llega, la mentira es rápida y llega casi siempre de primero pero casi siempre sera descalificada.

lunes, 19 de enero de 2015

¿Ladrón astuto o mega bruto?

En reciente conferencia de prensa Ricardo Martinelli gritó “No me he robado ni un fucking real”.
Comienzo por señalar que los psicópatas son personas de inteligencia superior, fríos, calculadores, mentirosos y, sobre todo, manipuladores. 

Debe entenderse en este escrito que, cuando digo ladrón astuto o mega bruto, es: supuesto ladrón o supuesto bruto. Dicho lo anterior formulo las siguientes interrogantes,
-          Cuando Martinelli pagó, con dinero del pueblo, centenas de millones más por los corredores, a pesar de que sus peritos lo evaluaron en menos, ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando pagó, con dinero del pueblo, decenas de millones más por radares y un mapa digital ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando compró tránsfugas con dinero del pueblo, para aumentar su pandilla de diputados ¿Fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando, con dinero del pueblo, pagó la construcción y en algunos casos la reparación de carreteras a 23 millones el kilómetro, cuando el costo debió ser muchísimas veces menos, ¿fue un ladrón astuto o mega bruto?

-          Cuando robó información íntima de la vida de los ciudadanos, con propósitos inconfesables, para chantajearlos, pinchando sus teléfonos y sus computadoras ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?
-          Cuando le ordenó a Tamburelli la compra de comida deshidratada y de mochilas con súper abultados precios, ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando ante la negativa de los Estados Unidos de pinchar a sus adversarios, le ordenó a Tamburelli la compra de equipos para interceptar comunicaciones privadas e íntimas, que le sirvieran para chantajear a sus diputados, ministros, magistrados y a todos a los que su mentalidad enferma de poder se le ocurriera ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando la construcción de un puente, para facilitar el tránsito en la ciudad, costó mucho más que la construcción del puente centenario, ¿fue un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando sacó a Panamá del Parlacen, por ser “una cueva de ladrones” y luego al terminar su mandato, en una carrera de velocidad más rápido que el jamaiquino Usain Bolt o el panameño Alonso Edward, tomó posesión anti estatuariamente ante el Parlacén. ¿actuó como un ladrón astuto o un mega bruto?

-          Cuando hicieron desaparecer las máquinas de escuchar de la Policía Nacional y al policía que, entre otros, la operaba ¿actuó como un ladrón astuto o como un mega bruto?

-          ¿Quién fue Martinelli para Panamá, un Robin Hood que le robaba a los ricos para ayudar a los pobres o un Robin Hood que le robaba a todos los pobres para enriquecerse él, a su círculo cero y demás rémoras?

-          ¿Fueron los subalternos y amigos de Martinelli los que lo hicieron supuestamente corrupto o fue a la inversa, fue él quien los hizo corruptos a ellos?

Como comerciante y especulador extremo, Martinelli no concibe los súper precios y las súper coimas como delitos contra el pueblo. Esas son cosas rutinarias en su insaciable sed de dinero. 

Cuando escucho a Martinelli, el astuto, súper inteligente, calculador, frío y manipulador decir que no ha robado ni un fucking real no puedo más que concluir que es un fucking psicópata.

Basilio Chong Gómez
CIP 8-94-599
Abogado

domingo, 18 de enero de 2015

¿Oír y ser escuchados?

El Tucán y su Escribano

Observamos una especie de caza de brujas en la sociedad, salen a relucir cosas que por el momento solo deseamos llamar no comunes, en el desempeño de cargos y funciones públicas,de hecho solo leemos y escuchamos acusaciones sin que la autoridad respectiva presente pruebas sobre hechos y cargos, esta no es una práctica que certifica el uso de buenos modales, culpar a personas sin presentar las pruebas de sus hechos es irresponsable, tampoco es claro el porque en medio de investigaciones se filtran resultados preliminares sobre cuya veracidad el ministerio público aún indaga, no estamos rompiendo una lanza por nadie en concreto, también seria hipócrita de nuestra parte decir que en lo personal el arresto del uno que otro no nos alegra, pero abogamos por que la ley sea cumplida en letra y contenido ya que no deseamos que inocentes paguen por los errores de otros pero sobre todo lo hacemos porque la materia es tan delicada que no deseamos que los culpables se escapen de la justicia.

Estamos en una fase de nuestra historia nacional en donde hay que escuchar con la debida atención, de lo contrario se nos escaparan detalles de las cosas y los mismos pueden decisivas al momento de armar el “rompecabezas”. La actual administración de Varela puede argumentar querer barrer con las malas prácticas de anteriores administraciones, pero no tiene el derecho de tapar sus propias irregularidades con las de las administraciones anteriores.

Por eso es indispensable que escuchemos con la atención debida para que formulaciones aparentemente similares a las nuestras, no confundan a la sociedad aquí creo conveniente citar a Trespatines y su famoso telegrama: vino Dulce de España,no es lo mismo que: vino dulce de España, suena y se escribe igual pero la una cosa cosa es la “prima” Dulce que llega de España y otra es el vino dulce que nos tomamos; hemos dicho: queremos una constituyente para refundar el estado nacional no hemos dicho queremos que la actual se reforme para acoplar al estado ; también hemos denunciado la corrupción gubernamental y estatal, no hemos denunciado la corrupción de la administración de Martinelli, entonces no debemos contentarnos con los anuncios de creación de una comisión de reformas constitucionales y mucho menos que el proceso de anti corrupción se limite a individuos sino que el mismo este dirigido contra formas de proceder en el sector estatal y privado de nuestra vida pública
.
Por ahora el gobierno del Sr. Varela nos presenta día a día a nuevos casos, acusados y arrestados por violaciones a las leyes respectivas pero a nuestro juicio no aborda el problema de fondo que nosotros expresamos.

Sin lugar a dudas algunos de los inculpados tienen conocimientos sobre las violaciones mencionadas ya sea porque las cometieron ellos mismos o las solaparon pero la esencia del problema sigue siendo que esto no fue hecho por iniciativa individual sino sistemáticamente por quienes ostentaron u ostentan el poder y no seria nada nuevo en la forma de proceder de estas fuerzas políticas, ya que en contra de lo que nos dicen hoy, sus formas de expresarse y anunciarse difieren de sus comportamientos para muestra un botón: nos repiten continuamente estar en contra de aparatos represivos y similares, juran su vocación civilista por eso “escucharon” la voz del pueblo que no deseaba aparatos represivos por eso ellos eliminaron los mismos, error! el ejército no fue abolido por voluntad mayoritaria del pueblo sino al contrario las reformas constitucionales planteadas por el gobierno impuesto tras la invasión fueron mayoritariamente rechazadas por el pueblo en un referéndum en 1992 y el los se “pasaron” esta voluntad popular por los sectores inferiores de sus cuerpos,eso se olvida muy frecuentemente, cosa que nos puede volver a pasar en la actual situación, a esa posibilidad hay que cerrarle el paso y cerrarle el piso. 

Constituyente si! Como nosotros lo pedimos. A nuestra forma de ver las cosas ellos crearon solapadamente nuevos organismos represivos que utilizaron los mismos métodos de las antigua FF.DD, es más fueron más allá y perfeccionaron los mismos, eso creyeron, ya que a falta de un concepto propio del estado nacional, pusieron los mismos en manos de diletantes y especuladores que lo único que deseaban era rebuscarse, aquí tenemos los resultados, lo que se destapa hoy día es solo una pequeña parte de la putrefacción reinante, las grabaciones intimas son para nosotros una forma de distracción y satisfacción del morbo no es la esencia del problema y mientras más distraídos nos mantengan desaparecerán los culpables intelectuales y materiales de los asesinatos contra campesinos a autóctonos perpetrados en nombre de sus cochinos y oscuros negocios.

No creemos que Varela este actuando movido por la casualidad quienes determinan sus pasos ya entendieron que el régimen instalado por ellos es un fracaso moral y político y J.C. Varela solo tiene la función de borrar las pistas y huellas por eso prefirieron a su persona porque de salir el candidato de Martinelli electo este estado se agravaría, pero de salir electo el candidato del PRD temían que el torrijismo aún latente, podría recobrar fuerzas y barrer con su proyecto.

Es obvio entonces que ha llegado el momento en que la sociedad panameña exprese su voluntad, como hacerlo? ¿ si aún permanecemos dispersos con mil y un voceros convencidos cada uno de estos de tener la razón? A nuestro juicio solo unificando a todas las fuerzas patrióticas que desean un estado libre e independiente, soberano económica y políticamente o sea un estado nuevo por ende creo oportuno repetir nadie es dueño de la verdad absoluta.

Es interesante ver a los Garúz, Moncada, Pérez y otros tras las rejas pero si toda la campaña anti corrupción de Varela solo se limita a ellos sin tocar a los responsables políticos se convertirá en una farsa. Pero si esta campaña no conduce a más transparencia en la cosa pública la desintegración del estado continuara. Por eso creo que es necesario que en estos momentos luchemos por la unidad de todas las fuerzas patrióticas ya que solo esta unidad puede provocar y producir los cambios que necesitamos. Tenemos que lograr que la oligarquía panameña vende patrias corrupta e inepta nos escuche por eso tenemos que hablar con una sola voz.

lunes, 5 de enero de 2015

La geopolítica latinoamericana, canales y Mariel.

Emir Sader

Bastaba la normalización de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, que apuntan hacia el final del bloqueo, para que se movieran las piezas del tablero comercial y geopolítico en la región, con el puerto de Mariel pasando a jugar un rol estratégico. Mariel se volverá beneficiario de las nuevas olas del comercio en el mundo, que incluyen a China y a América latina como sus agentes más importantes.

Sin embargo, otros movimientos proyectan un nuevo dibujo de la geopolítica mundial en la región. El canal de Panamá había cambiado la configuración del mundo, cuando fue inaugurado hace poco más de un siglo. Estados Unidos ha retomado el proyecto fracasado y fallido de Francia de construir el canal y se cerró así una etapa del comercio mundial, abriéndose otra.

Antes del canal de Panamá, todo el comercio y la circulación entre el Atlántico y el Pacífico se hacía a través del Polo Sur, con todo lo que representaba en gasto de tiempo y de recursos. Así que al asumir el proyecto, Washington ha inducido la separación de Panamá de Colombia, para hacer nacer un país que existiera alrededor del canal, bajo tutela norteamericana, que hizo del canal un territorio suyo por cien años.

De esa forma surgió lo que los panameños llaman la “esquina del mundo”, la única vía de comunicación entre los dos océanos más importantes del mundo, conectando sus regiones de más peso en el orden mundial. Aunque EE.UU. demostrara la disposición de hacer con la zona del canal lo que hace hasta hoy con Guantánamo, prorrogando indefinidamente la ocupación, el líder nacionalista panameño Omar Torrijos exigió el cumplimiento del acuerdo y logró que el canal pasara al control del gobierno de Panamá, pero siempre con Washington jugando un rol de supervisión militar sobre la zona.

Conforme el comercio marítimo fue aumentando, así como la dimensión de las naves, el mismo canal de Panamá se fue mostrando insuficiente para dar cuenta de las comunicaciones marítimas entre los dos océanos. Hace ya cuatro años Panamá aprobó –en referéndum nacional– un proyecto de modernización del canal, prácticamente la construcción de otro canal –proyecto concluido por una empresa española, que debe ser inaugurado en el primer semestre del 2015, después de difíciles renegociaciones por el aumento de sus costos–.

Paralelamente se desarrolla un proyecto todavía más ambicioso en términos de comunicación marítima y de rediseño estratégico: la construcción de otro canal entre el Pacífico y el Atlántico, por Nicaragua. El proyecto, alentado por mucho tiempo, por la misma configuración geográfica de Nicaragua, un país con grandes lagos, que pueden ser aprovechados para la construcción del canal, finalmente empieza a concretarse.

La responsabilidad por la construcción y el financiamento es de un millonario chino y su empresa constructora. El proyecto fue elaborado en poco tiempo, quedó listo rápidamente, tuvo la aprobación del gobierno de Daniel Ortega, pero enfrenta dificultades en su implementación.

Por un lado, su construcción cambiará el destino de Nicaragua, que pasará a tener en el canal su principal instrumento de obtención de recursos económicos, con todo su movimiento, además de obras anexas como un nuevo aeropuerto, una zona de libre comercio, entre otras. Por otro lado, algunos movimientos populares se han levantado en contra del proyecto, por las consecuencias que acarreará su construcción. Sin un plan sobre los daños ambientales, sin siquiera empezar las negociaciones con los cerca de 30 mil campesinos que serán desplazados de sus tierras –apenas con la promesa del gobierno y de la empresa china de que tendrán una justa indemnización–, en el momento en que se debiera iniciar la construcción del canal, grandes movilizaciones en las zonas afectadas, pero también en la capital, Managua, han producido enfrentamientos con la policía y varias docenas de presos.

Un proyecto de esas dimensiones y proyección es puesto en práctica sin más medidas preventivas sobre los efectos que su construcción generará, generando hostilidades, en lugar del orgullo de poseer una obra de esa importancia. El gobierno puede seguir respondiendo a las movilizaciones con la policía, pero la ocupación por parte de campesinos de territorios donde debieran estar empezando las obras dificulta concretamente su inicio, obligando al gobierno a negociaciones inmediatas y difíciles con los campesinos, que dicen no aceptar indemnizaciones y querer mantener sus tierras.

La construcción del canal de Nicaragua tendrá muchas consecuencias, empezando por la ruptura del monopolio del canal de Panamá y de la tutela del monopolio de EE.UU. sobre la circulación marítima entre los dos océanos. Uniéndose al puerto de Mariel, va a facilitar el comercio que involucra a países en plena expansión política de sus influencias, así como expansión comercial, como son los casos de China y de Brasil. Representa también la presencia china en el corazón de América latina y el Caribe. Los cambios en el panorama internacional, que hicieron de los acuerdos de los Brics en Fortaleza, Brasil, en julio del 2014, el acontecimiento de política internacional más importante del año, encuentran expresión regional con la inauguración del puerto de Mariel y las obras para la construcción del canal de Nicaragua.

Emir Sader, sociólogo y cientista político brasileño, es coordinador del Laboratório de Políticas Públicas de la Universidade Estadual do Rio de Janeiro.

La captura de Noriega fue la excusa para imponer un proyecto neoliberal y nuevas bases militares.

Mario Hernandez: Entrevista a Olmedo Beluche.

M.H.: Buenas noches Olmedo Beluche en la Ciudad de Panamá. El motivo del llamado es recordar los 25 años de la invasión norteamericana a Panamá en la madrugada de un 20 de diciembre de 1989. Comenzaría este reportaje preguntándote cuál fue el motivo por el que Estados Unidos invade Panamá, ya que aquí se habla mucho de que el verdadero objetivo de la invasión fue la captura del General Noriega, hombre fuerte de las Fuerzas Armadas de Panamá, porque se había negado a colaborar con Estados Unidos para llevar a cabo una invasión contra Nicaragua. Estuve leyendo extractos de tu libro “La verdad sobre la invasión” en donde discrepás con esta versión.

O.B.: En primer lugar es falso que el objetivo fuera simplemente capturar a Noriega, porque previamente, el 3 de octubre de ese año hubo un golpe de estado contra el General Noriega quien fue detenido, apresado y se lo ofrecieron a los norteamericanos que estaban a unos kilómetros de allí en el Comando Sur, recordemos que en ese tiempo todavía habían bases militares en Panamá; y Estados unidos no lo quiso, entonces el problema de Noriega es una excusa para un proyecto más complejo que Estados Unidos ha llevado a cabo en Panamá en estos últimos 25 años.

Muchos olvidan que Noriega admitió haber sido agente de la CIA desde que era casi un suboficial de la Fuerza Pública panameña y a otros se les olvida que después que el General Torrijos muere en circunstancias extrañas, se da fin a la fase populista del régimen militar panameño y empieza la fase neoliberal. Esa fase, durante la década del ´80, la dirige desde las Fuerzas Armadas el General Noriega junto con Estados Unidos, inclusive 1984 había sido marcado como el año para la “restitución de las instituciones democráticas” y para eso Noriega y los Estados Unidos pactaron poner al frente un hombre que se llamó Nicolás Ardito Barletta que iba a ser el Carlos Menem de Panamá.

Mediante un fraude impusieron a este señor que empezó a aplicar estos planes neoliberales en Panamá y paralelamente empezó una época de huelgas y de luchas muy fuertes que paralizó la aplicación del modelo neoliberal y llevó a la gente a movilizarse contra el régimen y contra Noriega admitiendo que era un régimen militar y neoliberal.

En ese momento se utilizaba el concepto “neomilitarista”. Entonces, uno de los motivos fundamentales de la invasión norteamericana fue estabilizar un régimen político que tuviera apariencia democrática, que la gente votara cada 5 años, pero para aplicar los planes económicos dictados por el Fondo Monetario Internacional. En Panamá eso se impuso mediante un tratado seis meses después de la invasión donde se dictaban las empresas a privatizar, la cantidad de empleados públicos a despedir, etc.

El otro objetivo era tratar de evitar que se retiraran las bases militares que el tratado Torrijos- Carter había puesto como fecha el año 2000, ese objetivo se complicó posteriormente, ellos intentaron un proyecto con el gobierno de Pérez Valladares en el año 94/97 que fracasó y esa situación se transformó en una serie de acuerdos de seguridad que mantienen una presencia norteamericana muy solapada en las fronteras y en 12 bases militares que se han impuesto recientemente.

Esos fueron los dos objetivos centrales, un régimen aparentemente democrático para una política neoliberal y complaciente con Estados Unidos y el intento de mantener bases militares.

M.H.: Olmedo, para esta invasión Estados Unidos moviliza 26.000 efectivos, en lo que fue la mayor operación militar desde la guerra de Vietnam. ¿Cuáles fueron las consecuencias humanas que sufrió el pueblo panameño y en particular ese barrio humilde que alguna vez recorrí con nuestro común amigo Carlos Castillo, el barrio del Chorrillo?

O.B.: Fue la invasión más cruenta de todas las que ha habido por parte del ejército norteamericano en Panamá, con el cual nos hemos topado reiteradamente desde el siglo XIX, desde 1857 ha habido intervenciones militares norteamericanas en nuestro país.

Oficialmente han contabilizado cerca de 500 personas muertas con nombre y apellido, la mitad civiles, la otra mitad militares que combatieron, pero hay una sospecha de que hay varios cientos más que fallecieron producto del bombardeo, pero no se han abierto las fosas comunes en las que fueron enterradas en ese momento y hay señalizados varios lugares donde testigos aseguran que se enterraron cuerpos. Solamente se abrió una fosa común que tiene más de 100 cuerpos en un cementerio público. El funcionario responsable del Hospital Santo Tomás, el hospital público del centro de la ciudad, dice que había un registro de más de 800 cadáveres que los norteamericanos desaparecieron para que no se conociera la realidad.

Heridos hubo más de 2000, en el Chorrillo, que es el barrio popular que quedaba junto al cuartel central se quemaron sistemáticamente por parte de los norteamericanos, 3 o 4 calles completas con casas de madera donde habían habitado los trabajadores del Canal durante décadas y perdieron su hogar entre 18 y 20.000 personas, sin mencionar los daños materiales que sobrepasaban los U$S 4.000 millones.

Aquí han desprestigiado a las víctimas de la invasión como norieguistas y exaltado a los norteamericanos como demócratas

M.H.: ¿Qué investigaciones ha hecho el gobierno panameño respecto de esta situación que estás comentando?

O.B.: Absolutamente ninguna, en Panamá todos los gobiernos desde hace 25 años, sean de derecha liberal o socialdemócratas, incluso el del hijo de Omar Torrijos, Martin Torrijos, no han hecho ningún esfuerzo por esclarecer lo sucedido, por eso este año, cuando se abrió la tumba común en el cementerio, la novedad fue la presencia del actual presidente, Juan Carlos Varela, que aunque no hizo ningún pronunciamiento oficial, la presidenta del Comité de los familiares de los caídos aprovechó para hacerle cuatro demandas, en primer lugar, que el 20 de diciembre sea declarado día de duelo nacional, cosa que aquí los comerciantes no quieren hacer porque está cerca de Navidad y solamente piensan en la caja registradora. En segundo lugar, pidió una comisión investigadora para esclarecer la verdad en la cuantía de las víctimas de la invasión; en tercer lugar le exigió un monumento o un museo de la memoria porque aquí han querido desprestigiar a las víctimas de la invasión como norieguistas y exaltar a los norteamericanos y, finalmente, le exigió asesoría jurídica pagada por el Estado, para demandar al gobierno de los Estados Unidos ante los tribunales internacionales por parte de las víctimas. El presidente no respondió pero dijo que nombraría una comisión para tal efecto que estaremos fiscalizando en los próximos meses para que se cumpla.

M.H.: Además de estas expresiones que señalás, ¿qué otras actividades se desarrollaron al cumplirse estos 25 años de la invasión?

O.B.: Este año al ser una fecha significativa hubo más actividades, aunque quiero recordar que los primeros cuatro años, durante el régimen de ocupación de Guillermo Endara, las movilizaciones eran muy grandes, hacíamos marchas de más de 20.000 personas sobre todo en 1990. Estábamos recordando que al cumplirse seis meses de la invasión hicimos la primera manifestación por la ocupación que sobrepasaba las 20.000 personas. Sin embargo, en los años posteriores, sobre todo cuando gobernó la socialdemocracia, se redujo mucho la asistencia.

En este año ya hubo varios actos de diverso tipo, el jueves pasado hubo un debate en la Biblioteca Nacional en la que participamos junto a diversos sectores, el 19 en la noche hubo una vigilia en la avenida costanera donde se hizo un acto, una performance representando los hechos y luego se proyectó una película, y la gran marcha que fue el propio día 20 de varios cientos.

M.H.: Aprovecho esta oportunidad para consultarte cómo ha impactado la apertura de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos.

O.B.: Acá todos los antiimperialistas que es lo que los panameños conscientes somos, estamos muy contentos porque consideramos que es una victoria del pueblo cubano, una victoria indiscutible. El presidente Obama ha tenido que reconocer el fracaso de 50 años de política agresiva y el fracaso del bloqueo a Cuba y esto se hace aún bajo el reconocimiento de que Cuba es un país independiente, sin haber transado en absolutamente nada.

Por supuesto que Estados Unidos tendrá su proyecto de penetrar ideológica y económicamente en Cuba, pero hasta ahora todo se mantiene bajo el mismo curso, entonces estamos muy contentos por eso porque es un reconocimiento, así como la liberación de los cubanos que estaban presos injustamente en Estados Unidos, donde a aquéllos que vigilaban las acciones terroristas de los cubanos en Miami los metieron presos y, sin embargo, mantienen libre a un hombre que se llama Luis Posada Carriles que puso una bomba en un avión de Cubana de Aviación en Venezuela en la década del ´70 y que aquí en Panamá en el 2000 intentó volar el auditorio en el que muchos panameños estábamos reunidos con Fidel Castro cuando vino a una Cumbre Iberoamericana, así que esa doble moral de los Estados Unidos también ha quedado al descubierto.

Olmedo Beluche es profesor de la Universidad de Panamá y dirigente político.

viernes, 2 de enero de 2015

Cuba y Estados Unidos: "¡ni un tantico así!”

Atilio Borón

Escribimos estas líneas con la inmensa alegría que nos produjo la exitosa culminación de la campaña que el pueblo y el gobierno de Cuba lanzaron para repatriar a los cinco luchadores antiterroristas injustamente encarcelados por la “justicia” de los Estados Unidos, que jamás se preocupó por enjuiciar a connotados y confesos terroristas como Orlando Bosch y Luis Posada Carriles o a un financista y ejecutor de atentados terroristas como Jorge Mas Canosa. Refiriéndose a “Los 5” Fidel dijo en su momento “volverán” y volvieron; como antes, en el incidente del niño Elián González, cuando también aseguró que Elián volvería a Cuba, y volvió. Dicho esto quisiéramos compartir una reflexión sobre las razones que explican el cambio en la política exterior de Estados Unidos en relación a Cuba y lo que esto podría significar para la Isla y América Latina y el Caribe. 

El absoluto fracaso de más de medio siglo de bloqueo y agresiones es uno de los factores más evidentes que originaron el viraje de Washington. La Revolución Cubana resistió a pie firme, dignamente y sin concesiones, tamaña agresión y al final del día el Goliat del planeta tuvo que reconocer su derrota, algo que muy rara vez hace la siempre arrogante superpotencia. Lo hizo el presidente Barack Obama en su discurso y de modo todavía más enfático su Secretario de Estado, John Kerry, cuando al pronunciar el suyo, un par de horas más tarde, dijo que “durante medio siglo aplicamos una política para aislar a Cuba y los que terminamos aislados fuimos nosotros.” Claro está que otros factores también jugaron un papel: la intervención del Papa Francisco fue mucho más allá de una piadosa exhortación o una “gestión de buenos oficios”, tal como convencionalmente se la entiende. Fue una mediación en donde la influencia papal para arribar a un acuerdo parece haber sido más gravitante que lo normal en este tipo de mediaciones. El tiempo permitirá calibrar con precisión las características de esa gestión. Además, el reiterado repudio que la política del bloqueo cosechaba año tras año en la Asamblea General de las Naciones Unidas, e inclusive en el seno de la OEA, fue debilitando la firmeza de la política anticubana. Otro factor fue la honrosa insistencia de los países latinoamericanos y caribeños sin excepción para exigir el fin del bloqueo y la liberación de “Los 5”. El papel de la UNASUR y la CELAC también fue de importancia para precipitar esta reorientación de la política de la Casa Blanca. Pero lo que a nuestro juicio fue decisivo para producir este viraje fue el cálculo geopolítico realizado por los estrategas del imperio, que recomendaba acabar con una política que no sólo era inefectiva -como las torturas de la CIA, según el reciente Informe del Senado- sino que además era contraproducente para garantizar la seguridad nacional estadounidense en momentos tan críticos como el que actualmente atraviesa el sistema internacional. En las páginas que siguen trataremos de desarrollar en cierto detalle este argumento.

La Transición Geopolítica Mundial y sus Desafíos para la Estabilidad del Imperio
Estados Unidos se enfrenta a un deteriorado cuadro geopolítico mundial que suscita una enorme preocupación en su clase dominante, sus representantes políticos e ideológicos, el Pentágono y sus agencias de inteligencia. En 1997, pocos años después del derrumbe de la Unión Soviética, uno de los más lúcidos (y cínicos) intelectuales orgánicos del imperio, Zbigniew Brzezinski, escribió un libro que resumía la visión estratégica dominante en ese momento y proponía un conjunto de recomendaciones para encarar con realismo –en lugar de las autocomplacientes ensoñaciones de los miembros del Proyecto para el Nuevo Siglo Americano, gran parte de los cuales integraron las filas del gobierno de George W. Bush- los desafíos de los años venideros. [1] En El Gran Tablero Mundial su autor descartaba la posibilidad de un debilitamiento del poderío global de Estados Unidos dado que su país aparecía, una vez desintegrada la Unión Soviética, como “la única e, indudablemente, como la primera potencia realmente global” en la historia del planeta. A partir de esta premisa el objetivo que se trazó fue formular una geoestrategia global e integral para preservar el papel central de Estados Unidos como “arbitro político” en todo el mundo, pero prestando especial atención a Eurasia ya que es ese y no otro “el tablero en el que la lucha por la primacía global” seguirá jugándose. Un continente fundamental que contaba para 1997 con el 75% de la población y el 60% del PNB mundiales, y las ¾ partes de los recursos estratégicos conocidos. Para ser exitosa dicha estrategia debía basarse en la construcción de “una comunidad global basada en las relaciones de cooperación”. [2] No obstante, a Brzezinski no se le escapaban las acechanzas que podían originarse como consecuencia de potenciales “contingencias relacionadas con los futuros alineamientos políticos (…) que intenten empujar [a los Estados Unidos] fuera de Eurasia”. 
 
En ese escrito Brzezinski identificaba tres escenarios que podrían plantear tales retos a lo largo del siglo veintiuno: el primero era un acuerdo entre Rusia y los principales países europeos, que debilitaría los vínculos entre Estados Unidos y Europa y mellarían la fortaleza de la Alianza Atlántica y en particular de la OTAN. Pero tranquilizaba a sus lectores diciendo que la probabilidad de esa contingencia era “bastante remota” (si bien no totalmente descartable), no habiendo por lo tanto razones para alarmarse. La segunda amenaza era un posible acuerdo entre China y Japón, por entonces la segunda economía del mundo y puntal de la presencia estadounidense en el Pacífico y en el mundo asiático. Probabilidad: también muy baja, porque los históricos conflictos que separaban a ambas naciones serían un obstáculo muy difícil de remontar. Había que monitorear los movimientos, los gestos y las iniciativas de esos dos países pero sin perder la serenidad. El tercer escenario, “el potencialmente más peligroso sería el de una gran coalición entre China, Rusia y quizás Irán, una coalición ‘antihegemónica unida no por una ideología sino por agravios complementarios’.” [3] Sin embargo, las probabilidades de que esta amalgama política pudiera cristalizarse eran, según Brzezinski, remotas. Ahora bien: los pronósticos de este consejero áulico del imperio fueron impiadosamente refutados por la historia ya que ese escenario -el menos deseado, el más temido y el más improbable- fue el que en estos últimos años irrumpió con fuerza en el sistema internacional. A mediados del 2014 Rusia y China firmaron importantísimos acuerdos –económicos, políticos y militares- de largo plazo, a los cuales se unió poco después Irán. En Septiembre la India solicitó formalmente su adhesión al Acuerdo de Cooperación de Shanghai y a finales de este mismo año Rusia selló un muy importante acuerdo con Turquía, cerrando de este modo una alianza que cambia radicalmente la correlación de fuerzas en el tablero de la geopolítica mundial en perjuicio de Estados Unidos, sus aliados europeos y Japón. Con la integración de la India y Turquía el panorama geopolítico euroasiático no podría ser más desventajoso para lo que Brzezinski denomina “Occidente.” 
 
En el año 2012, es decir, poco antes de que emergiera esta nueva coalición y quince años después de la publicación del Gran Tablero Mundial , Brzezinski dio a conocer su más reciente obra: Strategic Vision. [4] En ella el tono general del análisis se sitúa en las antípodas de su por momentos triunfalista texto de 1997. Ahora la preocupación es otra. En la primera parte de ese libro propone una sorprendente y muy significativa exploración histórica en torno a la “declinante longevidad de los imperios”, una reflexión insólita en relación al supuesto fundamental de la obra: Estados Unidos no es un imperio sino una potencia, la única potencia global. No obstante, este inesperado comienzo revela que en su fuero íntimo Brzezinski no se engaña, ni engaña a sus jefes y patrones, y sabe que Estados Unidos es la cabeza de un vasto sistema imperial y que, además, la lógica que decretó la declinación de todos los imperios anteriores, sin excepción, difícilmente exceptúe al americano. Como estudioso que es sabe muy bien que este no podrá ser eterno y duda de que siquiera pueda mantenerse más allá de unas pocas décadas. De ahí que las cuatro preguntas fundamentales que plantea en las páginas iniciales del libro sean las siguientes:
1) ¿Qué implicancias tienen la cambiante distribución del poder global desde Occidente hacia Oriente y el despertar político de la humanidad?
2) ¿Por qué decayó el atractivo de los EEUU, cuáles son los síntomas de su declinación doméstica e internacional y por qué se desperdició una oportunidad tan excepcional como el desenlace pacífico de la Guerra Fría?
3) ¿Qué consecuencias geopolíticas tendrían lugar si Estados Unidos perdiera su primacía en el ámbito del poder global? ¿Podría China ocupar su lugar en el 2025?
4) ¿Cómo debería EEUU redefinir sus objetivos geopolíticos a largo plazo, y cómo atraer, apoyándose en sus aliados europeos, a Rusia y Turquía a los efectos de construir un “Occidente” más inclusivo y vigoroso?
En resumen, el autor se formula interrogantes impensables una década atrás. Lo que antes se asumía como una verdad inconmovible, la primacía internacional de Estados Unidos, ahora es objeto de múltiples conjeturas, y por lo tanto las opciones estratégicas diseñadas en el pasado deben ser radicalmente re-examinadas.

Un mundo convulsionado
En este impensado escenario, en donde los rivales de Washington unen fuerzas, y los antiguos aliados –fervientes, como Turquía, o tibios, como la India- se pasan al otro bando, la rápida degradación de la situación internacional plantea enormes desafíos al imperio. La agenda exterior de la Casa Blanca se enfrenta con numerosos “puntos calientes” en los cuáles Estados Unidos está fuertemente involucrado, tiene muchos intereses en juego y se ve forzado a hacer apuestas cada vez más riesgosas y de incierto desenlace. En Oriente Medio la situación está fuera de control: después de haber avivado la hoguera del fundamentalismo sunita como ariete para hostigar a Irán y Siria, el trágico resultado de esa política fue la aparición del Estado Islámico, una organización criminal que dispone de los enormes recursos financieros derivados de su control sobre las zonas petroleras de Siria e Irak, y dispuesto a afianzar su dominio apelando a cuantas atrocidades sean imaginables. Originalmente formado por mercenarios reclutados por Estados Unidos y Arabia Saudita, financiado y armado por estos dos países, el genio se salió de la botella (como antes Osama bin Laden y Saddam Hussein) y, previsiblemente, comenzó a desarrollar una política propia que no es precisamente la que mejor favorece los intereses de Washington en la región. A la explosiva situación de esa parte del mundo, hundida en un interminable baño de sangre, hay que agregar la acelerada fascistización de Israel, que ha convertido a su estado en un engendro neonazi en donde el genocidio de los palestinos pasó a ser una práctica habitual ejercida con total impunidad e indiferente ante la repulsa casi universal que suscitan sus acciones. Más hacia el Oriente, en Asia Central, área donde se anuda una densa red de oleoductos y gasoductos de vital importancia para el mercado mundial de energéticos, la permanente inestabilidad de una zona surcada por ancestrales rivalidades y conflictos étnicos, religiosos y económicos de todo tipo se combina con periódicos estallidos de violencia que frustran de raíz cualquier posibilidad de establecer proyectos económicos de cierta envergadura para el aprovechamiento de sus enormes riquezas gasíferas y petroleras. [5] Más hacia el Este, al llegar al extremo del continente, la persistente disputa entre China y Japón por la delimitación jurisdiccional del Mar del Sur de la China agrega un condimento explosivo en el límite oriental de la antigua, y hoy altamente revalorizada, “Ruta de la Seda”. [6] 
 
¿Es todo? De ninguna manera. La situación del África Subsahariana es motivo de intensa preocupación, sobre todo por el arraigo que en algunos países proveedores de petróleo, como Nigeria, parece haber conseguido el islamismo radical. Pero, más al norte es donde se encuentra la fuente más importante y a la vez urgente de preocupaciones. En Europa hay una guerra en ciernes entre los países de la OTAN y Rusia. Las sucesivas sanciones económicas decretadas por Washington (y replicadas con deshonrosa obediencia por sus compinches europeos) junto al deliberado derrumbe de los precios del petróleo configuran, en términos prácticos, una declaración de guerra, y así lo ha entendido no sólo Moscú sino buena parte de la dirigencia política estadounidense. No sorprende, en consecuencia, que Rusia haya anunciado el 26 de Diciembre un significativo cambio de su doctrina estratégica, orientada ahora por la necesidad de contener las amenazas que se ciernen, desde Europa: la OTAN y el despliegue balístico norteamericano en ese continente, sobre su seguridad nacional. [7]
El dramático empeoramiento de la situación en Ucrania reconoce dos causas fundamentales: una, la expansión hacia el Este de las fronteras de la OTAN, en abierta violación de las promesas formuladas a los gobernantes rusos por sucesivos presidentes de los Estados Unidos y los jefes de estado europeos. La otra: la insistencia de la Unión Europea en incorporar a Ucrania y, de ese modo, penetrar por la puerta trasera en Rusia. Ambas iniciativas propiciaron la fulminante resurrección de la Guerra Fría, que se está recalentando aceleradamente. Un académico conservador norteamericano, John Mearsheimer , profesor de la Universidad de Chicago, culpó a Occidente por esta degradación del clima internacional. Era sabido, escribió, que Moscú jamás podía aceptar de brazos cruzados que la OTAN se extendiera hasta sus fronteras, y para colmo consentido por un gobierno impuesto en Kiev por un golpe de estado impulsado y financiado por Estados Unidos y sus aliados. [8] Esta irresponsable provocación es tan inadmisible para Rusia como lo hubiera sido para Estados Unidos si, en los años ochentas, Moscú y los países del Pacto de Varsovia hubiesen orquestado un golpe de estado en México e instalado sus tropas en la frontera con Estados Unidos. El desencadenamiento de la crisis en Ucrania desató como respuesta la reintegración al territorio ruso de la península de Crimea (anexada con el apoyo de sus habitantes) y alentó el separatismo de la población rusoparlante que reside en el este ucraniano. Las sanciones económicas aplicadas a Rusia por los países de la Alianza Atlántica tensaron la cuerda a grado tal que tiene escasos precedentes en la historia contemporánea. Moscú denunció estas maniobras y dijo que ellas son parte de una estrategia general cuyo objetivo es nada menos que precipitar el “cambio de régimen” en Rusia, ante lo cual Vladimir Putin ha dicho que su país no permanecerá indiferente ante esos designios y responderá con cuanto tenga a su alcance. Hay que recordar que Rusia dispone del segundo arsenal atómico mundial y que cuenta con unas fuerzas armadas muy bien equipadas. Como decíamos más arriba, si la OTAN llegara a lanzar un ataque con armas de destrucción masiva Moscú no vacilará en recurrir a su arsenal nuclear, lo que abre una atroz perspectiva para el futuro de la humanidad. [9] 
 
Trascendente papel de América Latina y el Caribe
En innumerables ocasiones Fidel y el Che afirmaron que Nuestra América es la retaguardia estratégica del imperio. Cuando Estados Unidos enfrenta graves desafíos en el frente internacional -como en los años setenta en el Sudeste asiático y muy especialmente en Vietnam- se vuelve sobre los países del área para desde allí tomar aliento y lanzar su arremetida. En aquella oportunidad lo que hizo fue sembrar dictaduras por toda la región, en donde salvo México, Colombia y Costa Rica, el resto de los países padecieron la instauración de regímenes cívico-militares que hicieron del terrorismo de estado una práctica cotidiana de ejercicio del poder, para lo cual contaron con el auspicio, colaboración, protección y financiamiento de Washington. 
 
En la actualidad la Casa Blanca continúa actuando bajo los lineamientos de la misma premisa, procurando acabar con la Revolución Cubana, liquidar a los gobiernos bolivarianos, terminar de domesticar a los de la “centro-izquierda” del Cono Sur y reforzar, vía la Alianza del Pacífico, a los regímenes neocoloniales y conservadores del área. Téngase en cuenta que en el turbulento tablero geopolítico internacional Nuestra América brilla como una envidiable, y única, zona de paz. Lo único que perturba este panorama es el conflicto interno en Colombia y la desestabilización de México, pero ambas son situaciones que se constituyen en el ámbito doméstico. [10] Sólo Colombia podría, si fracasaran las negociaciones de paz en curso en La Habana, alterar significativamente los equilibrios internacionales del área. No obstante, en el caso de México no habría que descartar que si se acelerara y profundizara la descomposición de la situación interna debido a la explosiva combinación entre el creciente poderío del narco -que podría llegar a someter a su arbitrio a las diversas ramas del aparato estatal- y una repotenciada protesta social los Estados Unidos podrían, en tal eventualidad, considerar muy seriamente la posibilidad de invadir y ocupar una parte de la frontera norte mexicana con el pretexto de preservar la “seguridad nacional” estadounidense amenazada por el caos al sur del Rio Grande. Lo hicieron en el pasado y nada autoriza a pensar que no volverían a hacerlo una vez más si lo considerasen conveniente. Hipótesis extrema, pero que en función de las enseñanzas de la historia sería sumamente imprudente descartar. Va de suyo que una movida de ese tipo tendría enormes repercusiones internacionales, que reverberarían mucho más allá del hemisferio americano. [11] 
 
Es a causa de todo lo anterior que Washington está poniendo cada vez más empeño en “reordenar” una región que desde el triunfo de Chávez en las elecciones presidenciales de 1998 ha ido progresivamente emancipándose de la pegajosa tutela y control que Estados Unidos ejerció sobre lo que con indisimulado desprecio se llama, en los círculos oficiales de ese país, su “patio trasero”. La oleada bolivariana desencadenada por Chávez facilitó la supervivencia de la acosada Cuba y tuvo reflejos concéntricos en el mundo andino: Bolivia y Ecuador se plegaron a la misma y, en el litoral atlántico, surgieron gobiernos más moderados en Argentina, Brasil y Uruguay pero que, pese a la tibieza de algunas de sus iniciativas, en el terreno internacional aportaron un apoyo decisivo para, entre otras cosas, hacer naufragar el proyecto más importante que el imperio tenía reservado para América Latina y el Caribe: el ALCA, sepultado en Mar del Plata en Noviembre del 2005. 
 
El cambio de política hacia Cuba tiene por objetivo neutralizar un permanente factor de perturbación de las relaciones hemisféricas y abrir el paso a una política más eficaz para recuperar el control las díscolas naciones del sur. El objetivo es claro: garantizar la estabilidad y la complicidad de la retaguardia imperial para que Washington pueda actuar en los “puntos calientes” arriba señalados sin temor a que su distracción en lejanos teatros de operaciones desate una radicalización tan indeseable como incontenible en los países de América Latina y el Caribe. Para enfrentar con éxito esta tercera guerra mundial en gestación es esencial retomar el control de Venezuela, donde al día de hoy se alojan las mayores reservas comprobadas del mundo. Pero dicho objetivo no se alcanzará manteniendo la vieja y fracasada política hacia Cuba, que provoca la repulsa del resto de las naciones del hemisferio. Por eso el presidente Barack Obama dió el primer paso para “normalizar” las relaciones con la Isla pero al día siguiente redobló su ataque a la República Bolivariana promulgando un proyecto de ley, impulsado nada menos que por el Senador Bob Menéndez (conocido por sus estrechas vinculaciones con la mafia anticastrista de Miami) [12] que establece sanciones económicas a gobernantes y políticos venezolanos “responsables por violaciones de los derechos humanos de manifestantes antigubernamentales” que entre Febrero y Abril del 2014 tomaron las calles y mediante violentas manifestaciones exigían la renuncia del presidente Nicolás Maduro. Ni a este impresentable senador ni a Obama les importó que los autores o instigadores de actividades violentas –incluyendo asesinatos, robos, incendios, destrucción de edificios y bienes públicos, etcétera- que busquen alterar el orden constitucional o remover autoridades apelando a la violencia serían acusados del delito de sedición en Estados Unidos (y en casi todo el mundo) y pasibles de ser sancionados con durísimas penalidades que, en este país, incluirían la prisión perpetua. Pero como se trata de recuperar a la Venezuela Bolivariana de cualquier forma, los autores intelectuales y apologistas de esos actos de salvaje vandalismo, como Leopoldo López y María Corina Machado, lejos de ser acusados por esos delitos son exaltados como figuras ejemplares, síntesis de los valores republicanos y libertarios, y elevados a la categoría de “combatientes por la libertad”. Poco importa que la mayor parte de las víctimas de aquel intento sedicioso fuesen miembros de los servicios de seguridad del estado y militantes chavistas, tal como ha sido reconocido por organizaciones independientes de derechos humanos radicadas en Venezuela. Para no hablar del doble rasero que significa sancionar a miembros del gobierno venezolano por preservar el orden constitucional del asalto de los sediciosos y no proceder de igual modo, por ejemplo, con las autoridades colombianas cuando informes inapelables certifican que el ejército ejecutó al menos a 5.763 civiles inocentes entre 2000 y 2010; o con las autoridades hondureñas, en donde después del golpe de estado de 2009 los asesinatos extrajudiciales se realizan con total impunidad; o con las de México, en donde es sabido que la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en Ayotzinapa fue orquestada y ejecutada con la participación -o al menos la abierta complicidad- de autoridades civiles y militares de la Federación y del estado de Guerrero? [13]

La espina cubana
La “normalización” de las relaciones con Cuba tiene pues una tenebrosa contrapartida: liberar las manos del imperio para abalanzarse con fuerza para doblegar al gobierno chavista y recuperar el petróleo venezolano. [14] Además responde a una necesidad geoestratégica insoslayable, y ante la cual tanto la ruptura de relaciones diplomáticas como el bloqueo se convirtieron en molestos estorbos para Washington. Lo que se logró con ambas políticas fue facilitar la penetración de China y Rusia en la mayor de las Antillas y, por extensión, en la “tercera frontera” de Estados Unidos: el Mar Caribe. Todos los textos e informes recientes sobre la seguridad nacional norteamericana señalan una y otra vez que aquellos dos países son “enemigos” que es preciso vigilar, controlar y, de ser posible, someter o derrotar, toda vez que la recomendación de Brzezinski en el sentido de “atraer y seducir” a ambos países demostró ser un rotundo fracaso. Máxime cuando, en el Mare Nostrum norteamericano China ha emprendido sin consultar ni mucho menos pedir permiso a Washington un megaproyecto llamado a ejercer una extraordinaria influencia no sólo en el comercio internacional: un nuevo canal interoceánico a través de Nicaragua, obra para la cual el nuevo puerto cubano de Mariel asume una importancia estratégica. Rusia, por su parte, ha dado a conocer sus planes de impulsar la proyección global de su armada, lo que contempla, entre otras cosas, una mayor presencia en aguas caribeñas. Lo que estos dos países hacen en Cuba, y están haciendo en la zona del Gran Caribe, es un misterio para las agencias de inteligencia y las fuerzas armadas estadounidenses. ¿Hay proyectos militares en juego que subyacen a los crecientes relacionamientos económicos que China y Rusia desarrollaron en el área? De ser así, ¿cuáles son, donde están localizados y qué implicaciones tienen para la seguridad nacional de los Estados Unidos? ¿Cómo podrían ser neutralizados? ¿Cuál es el estado de la “sociedad civil” en Cuba? ¿Cuál debería ser la hoja de ruta para preparar el tan anhelado “cambio de régimen” que ponga fin a la Revolución Cubana? ¿Qué modelo aplicar: la “revolución de terciopelo”, al estilo checo, o hay condiciones para ensayar una fórmula más rápida y violenta, al estilo de los “cambios de régimen” practicados en Libia o Ucrania? Todas estas son cuestiones de enorme importancia que no pueden ser confiadas a “amateurs” como Alan Gross. Por el contrario, hay que desplegar en la isla un número suficientemente grande de agentes para obtener información sensible y confiable, para lo cual se precisa la cobertura de una embajada dotada de un numeroso personal que, bajo el paraguas diplomático, pueda realizar esas actividades de inteligencia. 
 
La política seguida a lo largo de más de medio siglo demostró ser, como decíamos más arriba, no sólo inefectiva sino contraproducente. Y Obama quiere corregir eso, pronto. Claro que la plena normalización diplomática exigirá que el Congreso levante el bloqueo, de lo contrario la iniciativa anunciada el 17 de Diciembre quedaría a mitad de camino, no sólo por la incoherencia que significa pretender “normalizar” las relaciones entre Cuba y Estados Unidos y, simultáneamente, mantener el bloqueo. Se dice que los sectores más reaccionarios del espectro político norteamericano en el Congreso se opondrán a esa iniciativa. Seguramente será así, pero no sería raro que junto a poderosos intereses comerciales -deseosos de establecer vínculos con Cuba- el lobby del Pentágono y la CIA convenza a los más recalcitrantes que la seguridad nacional norteamericana exige votar el fin del bloqueo, algo que hasta apenas ayer parecía imposible y que el propio gobierno de Estados Unidos promoverá no por razones de respeto a la legalidad internacional o solidaridad con el pueblo cubano sino exclusivamente en función de sus intereses estratégicos globales. Tanto Obama como Kerry lo dijeron con todas las letras: Washington no abandona su propósito de fomentar las fuerzas que dentro de Cuba pudieran precipitar un “cambio de régimen”, fomentar el activismo y la participación de la “sociedad civil”, y promover una “prensa libre” y el pluralismo político, preocupaciones estas que desaparecen como por arte de magia cuando el falaz régimen norteamericano habla de Arabia Saudita, país sin sociedad civil, sin prensa libre y en donde los partidos políticos están prohibidos. Sería inútil exigirle coherencia doctrinaria a un imperio cuyo objetivo excluyente es saquear los bienes comunes de nuestro planeta para mantener un patrón de consumo absolutamente irracional e insostenible, no ya en el largo plazo sino en la actualidad y mediante la militarización de las relaciones internacionales. Lo cierto es que, pese a toda la verborragia, el objetivo estratégico de Estados Unidos sigue siendo el mismo; lo que cambia es la táctica. Ahora se recurrirá al “poder blando”, eufemismo que significa tratar de apelar a los recursos derivados del supuesto atractivo de la sociedad norteamericana, sus también presuntos valores de igualdad, justicia, libertad, convenientemente manufacturados por la industria cultural basada en Hollywood pero desmentidos día a día por la realidad, para convencer a los cubanos mediante un intenso bombardeo propagandístico que una sociedad que mata afrodescendientes a destajo, que deja grandes segmentos al margen de toda atención médica y de la seguridad social, que impide que sectores de clase media puedan acceder a las universidades y que cuenta con la peor distribución de ingresos y recursos del mundo desarrollado es el espejo en el cual deben ver su propio futuro. “Poder blando”, aclarémoslo de entrada, que es apenas el reverso de la medalla en cuyo anverso se encuentra el “poder duro” de la mayor fuerza militar jamás conocida en la historia de la humanidad y dispuesta a ser aplicada sin mayores escrúpulos cuando sea necesario. 
 
Muchos observadores han expresado su preocupación por este cambio de la política norteamericana. ¿Representa o no un desafío para Cuba? ¡Por supuesto que sí!, pero aún peor es el reto emanado de la continuidad sine die del bloqueo, que ha causado enormes daños materiales a Cuba. Según las últimas estimaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país el costo económico de esa política equivale a dos Planes Marshall en contra de la Isla, mientras que con un solo Plan Marshall se reconstruyó la Europa devastada por la Segunda Guerra Mundial. Ni se hable de los costos “no económicos” medidos en sufrimientos humanos, privaciones, frustraciones y otras secuelas de esa criminal política de agresión imperialista. Este fue un desafío que Cuba supo repeler, pero a un precio exorbitante. La continuidad indefinida del bloqueo obliga a preguntar cuanto tiempo más podría Cuba resistir esa situación sin erosionar la legitimidad del orden revolucionario, librando batalla en un terreno en el cual no tiene chances de prevalecer. En cambio, el desafío que plantearía la penetración norteamericana –económica pero también política y cultural- una vez eliminado el bloqueo podría ser respondido desde una posición mucho más favorable. Tal como lo recordara José Martí, “trincheras de ideas valen más que trincheras de piedras”, y Cuba posee, gracias a Martí y a la incansable labor pedagógica de Fidel a lo largo de más de medio siglo, una formidable trinchera de ideas contra la cual se estrellará la propaganda norteamericana, el consumismo desenfrenado y las mentirosas ilusiones fomentadas por el American way of life que el pueblo cubano conoce muy bien desde 1898. Sin dudas, la densidad de la cultura cubana es incomparablemente más fuerte que la salud de su economía y librar la batalla en el terreno cultural, para derrotar al “americanismo”, como le llamaba Antonio Gramsci, es la táctica sin dudas más apropiada. La historia demuestra que Cuba puede derrotar a Estados Unidos desde la cultura y la política, no desde la economía. De los dos desafíos, por lo tanto, el más manejable es el que se abre con la normalización de las relaciones diplomáticas y el eventual fin del bloqueo. Si en la ex Unión Soviética “los espejitos de colores” del capitalismo fueron aceptados como buenos por su población fue porque allí no hubo ni un Martí ni un Fidel. No es el caso de Cuba, cuya población tuvo estos dos geniales maestros y además conoce el imperio como pocas, porque le tocó sufrirlo entre 1898 y 1958, y sabe muy bien que una cosa es la propaganda capitalista y otra completamente distinta el capitalismo “realmente existente”. 
 
Por eso, ante las novedades aportadas días atrás y para evitar una re-edición de la “Obamamanía” que tantas decepciones ocasionara entre los ilusos que cayeron en esa trampa, y que ahora creen que Washington cambió, que abandonó sus planes de hacer retroceder el reloj de la historia hemisférica hasta la medianoche del 31 de Diciembre de 1958, antes del triunfo de la Revolución Cubana, se impone recordar lo que dijera el Che: “al imperialismo no se le puede creer ni un tantico así, ¡nada!” Sería gravísimo desoír tan sabio consejo en una coyuntura como la actual, cuando la validez de las palabras del “guerrillero heroico” es mayor que nunca. 
 


[1] Cf. El gran tablero mundial. La supremacía estadounidense y sus imperativos geoestratégicos  ( Madrid y Buenos Aires: Paidós, 1997)
[2] Para un examen de estos temas ver nuestro América Latina en la Geopolítica del Imperialismo (Buenos Aires: Ediciones Luxemburg, 2012 y nueva edición aumentada en 2014). Esta nueva edición está disponible en México, España, Venezuela, Cuba y, próximamente, lo estará en Chile, Bolivia y Ecuador). Véase asimismo “Pensamiento Estratégico Estadounidense”, la transcripción de la conferencia que el autor de estas líneas y Alexia Massholder ofrecieran en el ISRI (Instituto Superior de Relaciones Internacionales) del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, en el mes de septiembre del 2014 y que próximamente estará accesible en la web.
[3] El Gran Tablero , op. cit, pg. 63.
[4] Strategic Vision. America and the crisis of global power (New York: Basic Books, 2012)
[5] Sobre este tema ver Pepe Escobar, Globalistán: How the globalized world is dissolving into liquid war (Ann Arbor: Nimble Books, 2006) y su más reciente Empire of Chaos (Ann Arbor: Nimble Books, 2014)
[6] Sobre el tema de la nueva “Ruta de la Seda” ver Pepe Escobar, “Integración eurasiática contra el Imperio del Caos”, en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=193515
[7] Un indicio de la extrema gravedad de la situación actual se infiere del anuncio oficial de esta nueva doctrina, en cuya ocasión Moscú declaró que si bien esta es de carácter defensivo no renunciará al derecho utilizar su arsenal nuclear. El artículo 27 de la doctrina dice que "la Federación de Rusia se reserva el derecho a utilizar armas nucleares en respuesta a ataques con armas nucleares u otras armas de destrucción masiva en contra de Rusia y/o de sus aliados, así como en el caso de una agresión a la Federación de Rusia con armas convencionales que suponga una amenaza para la existencia del Estado". Nótese que entre los aliados sobresalen sus socios del BRICS: Brasil, India, China y Sudáfrica. Esta clase de afirmaciones no se escuchaban en Rusia desde los tiempos de la Unión Soviética. Ver “La nueva doctrina militar de Rusia cita a la OTAN como una de las principales amenazas”, en http://actualidad.rt.com/actualidad/161547-putin-modifica-doctrina-militar-rusia
[8] Ver su “Why the Ukraine crisis is the West’s fault” , en Foreign Affairs (Septiembre-Octubre 2014) http://www.foreignaffairs.com/articles/141769/john-j-mearsheimer/why-the-ukraine-crisis-is-the-wests-fault Hemos tratado este tema in extenso en nuestro “¿Rumbo hacia la Tercera Guerra Mundial?” en mi blog: www.atilioboron.com.ar y en http://www.telesurtv.net/bloggers/Rumbo-hacia-una-Tercera-Guerra-Mundial-20141217-0008.html
[9] Antes de llegar a la situación de los últimos días Noam Chomsky había alertado sobre la extrema peligrosidad de la actual situación internacional, que podría, en el “escenario del peor caso”, culminar con una guerra termonuclear que destruyera a sus iniciadores. Ver su “ World ominously close to nuclear war” en http://rt.com/news/202995-chomsky-rt-nuclear-war/
[10] Por supuesto, podría agregarse el caso de Honduras, un país que desde el golpe de estado que desalojó a Mel Zelaya del poder ingresó en una interminable espiral de violencia doméstica causada por el paramilitarismo -encargado de “disciplinar” a la población hondureña- y su aliado natural en todos nuestros países: el narcotráfico. También el de Haití, cuyo martirio parecería no tener fin. Pero aún así, estos dos casos no tienen, en el momento actual, condiciones para alterar decisivamente la situación del hemisferio.
[11] Recuérdese que con la firma del ASPAN, el Acuerdo para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte, Estados Unidos ya dispone de numerosos efectivos de sus cuerpos policiales, de inteligencia y de las propias fuerzas armadas actuando a plena luz del día y “legalmente” en territorio mexicano. Una invasión sería un salto en la magnitud de esa presencia más no una absoluta novedad.
[12] El 25 de Enero de 2014 la cadena televisiva NBC informaba desde Nueva York la ampliación de la investigación por crímenes federales que podría haber cometido el senador demócrata por New Jersey Robert “Bob” Menéndez, quien es un asiduo visitante de los juzgados de su país. En este caso el Departamento de Justicia está investigando las gestiones hechas por el senador a favor de William y Roberto Isaías, dos banqueros ecuatorianos fugitivos de la justicia por multimillonarias estafas cometidas durante las turbulencias de los años noventa en Ecuador. Los Isaías, al parecer, hicieron significativas contribuciones a favor de Menéndez a cambio de la protección mafiosa que este le prestó para que, a pesar de las requisitorias de la justicia ecuatoriana, pudieran radicarse sin problemas en Estados Unidos y desarrollar en ese país lucrativas actividades. Más en:
[13] Sobre esto ver Alexander Main, “ Un paso adelante y un paso atrás en la política de Estados Unidos hacia América Latina ” (Washington: Documento de Trabajo Center for Economic and Policy Research, 19 Diciembre 2014)
[14] Sobre esto ver el sugerente artículo de Rafael Bautista Segales., “¿Del bloqueo a Cuba al bloqueo al ALBA?”, en ALAI, 24 Diciembre 2014. http://alainet.org/active/79714
 
 

"Cinco lustros sin la dictadura militar que imperó durante 21 años.."

Miguel Antonio Bernal V.
Preocupante resulta la ausencia notoria en los medios y foros, de los 25 años transcurridos ‘en democracia’, desde la invasión armada que fuimos objeto los panameños.
Cinco lustros sin la dictadura militar que imperó durante 21 años, parecen no contar en nuestra sociedad en la que, ‘lo que nos pasa es que no sabemos lo que nos pasa’. La despolitización a la que hemos sido sometidos, pesa cada día más en que nos importa menos hacia dónde vamos, ni cómo vamos.
El balance que no quiere hacerse por parte de gobernantes y gobernados, es un botón de muestra de lo desconectados de la realidad y de lo domesticados que está la gran mayoría de ciudadanos. Mientras tanto, los canallas andan cada día más envalentonados, pisoteando lo poco de decencia que queda en la cotidiana impunidad e injusticia que nos envuelve.
El torrencial aguacero de mentiras despiadadas nos inunda de confusión y resignación, remedios malsanos que no contribuyen en nada a construir una sociedad moderna y realmente democrática. La perplejidad que aflora en los ciudadanos maltratados por la falta de luchas y la falta de derechos, nos pone como arrieras sin pestañas incapaces de distinguir la ausencia de legitimidad y la ausencia de gobernabilidad, como le llaman ahora a los espejismos de democracia que han ido montando durante todos estos años, los unos y los otros.
La reducción del Estado social, heredado de la constituyente del 46, ha crecido con el individualismo rampante y la privatización del sector público, la mercantilización de la vida, de la salud convertida en mercancía, la desregulación de la economía, de la partidocracia, el monopolio de los medios de comunicación, los modelos impuestos por transnacionales antipanameñas, ausencia absoluta de independencia judicial, la Policía militarizada y corrupta a la par del legislativo.
Todo ello envuelto en el celofán del Ejecutivo practicante del clientelismo, populismo, nepotismo, negociados, de los simuladores y farsantes que, durante 25 años, han secuestrado la democracia.