miércoles, 9 de mayo de 2012

¿Qué sucede en Panamá hoy, a 23 años de la criminal invasión norteamericana?


Por Rubén Sousa D.

Panamá hoy en día ha estado muy presente en las paginas noticiosas de muchos periódicos y otros vehículos de la comunicación social.  Esto ha estado ocurriendo así a raíz de los acontecimientos relacionados con la lucha de minorías étnicas por preservar su derecho a los recursos naturales que se encuentran en sus territorios y cuya propiedad está protegida y reconocida tanto por leyes nacionales como internacionales.

Sin embargo Panamá, no solo ha estado siendo noticias por estos acontecimientos, también se ha estado distinguiendo por ocupar los primeros lugares, entre los países latinoamericanos, por su nivel de crecimiento económico, que en promedio en los últimos años ha sido del orden de un 8 % aproximadamente. Hemos mencionado estos dos hechos por ser contradictorios entre si ,pues mientras uno de ellos nos muestra la negación de los derechos a los pueblos originales , el otro nos habla de la bonanza que reina en un país con un gran crecimiento y cuyos resultados deberían alcanzar para todos, por la relativamente pequeña población de esta nación centroamericana.

Si esta contradicción la ampliáramos a lo que en general ha venido sucediendo en el país desde la invasión norteamericana, se establecería una especie de paradoja de un Estado que activamente promueve las condiciones de crecimiento económico , mientras que resulta completamente incapaz de resolver los más elementales problemas sociales y de seguridad social. Se trata posiblemente, de un Estado que cada vez mas toma la forma de lo que se conoce como un Estado fallido.

Así las cosas, muchos se preguntan, ¿ Qué es lo que sucede en este país hermano ?, sobre todo si se toma en cuenta que no hace mucho tiempo atrás, Panamá logró hacerse dueña de su más importante activo económico, el Canal de Panamá, fuente de inmensas riquezas que se originan por el desarrollo de la economía canalera, la cual le permite a nuestro país una relación directa con el resto del mundo.

Breve antecedente a la invasión norteamericana de diciembre del 89

La lucha generacional que se libró en nuestro país por recuperar su soberanía total sobre todo su territorio, contó con el apoyo de la inmensa mayoría del pueblo, sobre todo entre las filas de la juventud, que soñaba con que el fruto de esa lucha sería utilizado para garantizar un mejor porvenir a las presentes y futuras generaciones, a través del mayor uso colectivo posible del mismo. Sin embargo ,después de la muerte del General Torrijos, la conducción el proceso revolucionario por él encabezado ,entró en una situación de franco retroceso y desmantelamiento de sus logros, En estas circunstancias, el apoyo del movimiento popular a la lucha de liberación nacional se fue deteriorando al mismo tiempo que se fortalecían las posiciones de las fuerzas reaccionarias pro imperialistas, las cuales , aprovechándose de esta última situación y aunado a la corrupción rampante entre los militares y sus adeptos allanaron el camino para la invasión del 89.

Unido a lo anterior, la dualidad mostrada por el general Noriega con respecto a los Estados Unidos , desobediente en algunas cosas, como lo de su negativa a cooperar con una posible intervención a Nicaragua, y sumiso en otras, como lo del trafico de drogas para la compra de armas a la Contra nicaragüense, creó una desconfianza y división a lo interno de las instancias de poder norteamericano, lo que finalmente promovió la decisión de invadir Panamá con el propósito de desmantelar de una vez por todas la posibilidad de que una fuerza militar, como la Fuerza de Defensa de Panamá, con una acumulación y formación patriótica, sobre todo, entre la oficialidad joven , pudiera constituirse en un ente capaz de desarrollar nuevamente posiciones antimperialistas en defensa del interés nacional.

La invasión y sus consecuencias

A raíz de la invasión, los norteamericanos instalaron en Panamá un modelo de dominio y manejo del país que les permitiera la mayor estabilidad posible con el fin de prolongar el papel de nuestra nación en la geo- política establecida para el área latino americana.

Este modelo de conducción política, conocido como bipartidismo, permitió que hasta el año del 2009 se alternaran en el poder los dos partidos más importantes, entre ellos el Partido Democrático Revolucionario PRD, el cual a través de este proceso , ha venido transitando desde una posición de centro izquierda inicial a la de centro derecha actual, en el marco de una visión neo liberal y de abandono de la perspectiva de liberación nacional.

Así las cosas, Panamá, después de la salida de los norteamericanos ,pasó de ser un país de dominio colonial estadounidense a otro de dominio neo colonial por la misma potencia, con las respectivas consecuencias de este hecho.

En el proceso de su desarrollo, el bipartidismo, sustentado en la visión económica neo liberal, con el correr del tiempo, ha ido creando ,de manera natural, sus propias contradicciones que hoy lo mantienen en una profunda crisis.

Esta visión neo liberal en Panamá, guiada por las propuestas e imposiciones de los organismos financieros internacionales, se comenzó a articular a mediados de la década de los años 80 tomando una forma concreta de modelo de acumulación por desposesión.
Todas las fuerzas que han detentado el poder del estado en los últimos 23 años, dentro del modelo del bipartidismo derivado de la invasión, han utilizado el poder político del estado para asegurarle al capital, nuevos y rentables espacio de acumulación. Las políticas desarrolladas a través de este modelo, comenzando con las privatizaciones de los años 90, se han ido fortaleciendo con el tráfico de influencia y corrupción y se han profundizado con nuevos despojos del patrimonio nacional a través de la venta de sus activos, la entrega de la riquezas minerales e hídricas a los consorcios internacionales que hoy tratan de salvar sus capitales de la debacle causada por la crisis mundial del capitalismo. Esta tendencia destructiva creciente, ha llevado a los que detentan el poder a deteriorar aun más a la ya alicaída institucionalidad democrática con el fin de imponer nuevas leyes y disposiciones para quitar del paso o debilitar a todo lo que se opone a sus designios, incluyendo la Ley máxima del estado panameño, la Constitución Nacional.

Obviamente que el desarrollo del modelo de acumulación por desposesión prohijado por el bipartidismo , no habría sido posible si no se agregan otras consecuencias de la invasión como el debilitamiento de la capacidad de negociación de los trabajadores a través del desmantelamiento de los más poderosos sindicatos como el de la electricidad y telefonía junto a la persistencia de una importante franja de subempleo e informalidad, las sucesivas reformas al código de trabajo, la práctica de cooptación de una buena parte de la dirigencia y burocracia sindical, y la aplicación sesgada de la legislación laboral en contra de los trabajadores y así evitar la formación de nuevos sindicatos entre otros. Como muestra de la veracidad de esta última aseveración, en Panamá existe una negación del derecho de los trabajadores del sector público a la sindicalización.

Así las cosas, con la política neo liberal y su modelo de acumulación por desposesión , operada por el bipartidismo entre el Partido Panameñista y el Revolucionario Democrático( PRD), el Estado panameño se ha venido desmontando en su capacidad de hacerle frente a los problemas sociales como , el alto costo de la vida, la inseguridad, la falta de empleos dignos , atención deficiente de los problemas sanitarios y de salud , educación pertinente al desarrollo nacional liberador, lo que en suma ha contribuido al aumento de la pobreza e inequidad.

La situación actual

El bipartidismo panameño basado en una práctica neo liberal a través del modelo de acumulación por desposesión como basamento económico, ha alcanzado su máximo nivel de deterioro con el ascenso al poder de un nuevo actor político que antes no estaba claramente presente en el juego de la alternabilidad.

Efectivamente, a partir de las últimas elecciones presidenciales del 2009, la alternabilidad establecida como fruto de la invasión se rompe debido al descredito y debilitamiento de los partidos que hasta ahora habían participado.

El nuevo actor que irrumpe en el juego del bipartidismo , el Partido Cambio Democrático que hoy nos gobierna , a través de la figura de Ricardo Martinelli , ha significado un giro a la política panameña , pues introduce la presencia directa , sin intermediarios, del empresariado en la cúspide del poder político. Esta burguesía que hoy nos gobierna y que representa el interés del capital financiero, ha exacerbado los vínculos con el capital internacionales de tal manera que la sostenibilidad del modelo de crecimiento y acumulación solo es posible en la presencia de una creciente disponibilidad de crédito y financiamiento externo. En este sentido el componente externo de la deuda país se elevó en un 60% entre los años 2003 y 2010. Por los datos que aparecen en la publicación mensual de la Universidad de Panamá, intitulada” Seguridad y Soberanía Alimentaria, a cargo del prestigiosos economista nacional, Doctor Juan Jované, entre los años 2004 y 2010, el Estado panameño en términos netos ha pagado al exterior un total de 7,804.1 millones de dólares lo que representa cerca del 5.9 % del PIB de ese periodo. Una buena parte de dichas salidas de excedentes se utilizaron para el pago de intereses y comisiones de la deuda externa pública.

En una buena medida, este gobierno ha reafirmado con creces la política de convertir al estado en un instrumento de redistribución de los ingresos y la riqueza a favor del capital transnacional y de su propio grupo oligárquico financiero.

La profundización de la política de despojo practicada por este nuevo gobierno surgido en el 2009, se ha materializado en algunos casos y visualizado en otros, a través de las siguientes acciones:

1-Un aumento de concesiones mineras y las destinadas para la construcción de hidroeléctricas ofrecidas sobre todo al capital europeo , norteamericano y canadiense, los cuales han venido a despojar a diversas comunidades de pueblos originarios y campesinas de sus derechos ancestrales sobre la tierra y el uso de los recursos naturales, entre los que se encuentran el agua, los recursos minerales y los bosques.

2- El interés mostrado de introducir ,a través de la conocida Ley 349 el llamado esquema de Asociación Público Privada ( APP), como mecanismo de privatizar la generación de servicios públicos, incluyendo salud, educación así como el de provisión y explotación de infraestructura públicas por parte del capital privado. Si bien es cierto que el gobierno no pudo concretizar su intento de privatizar los servicios públicos en salud y educación, debido a la gran movilización del movimiento popular, si lo ha estado realizando en la construcción de infraestructuras como el Metro de Panamá, la Ciudad Gubernamental, el Centro de Convenciones e infraestructuras viales.

3-El interés mostrado por reformar el llamado Fondo Fiduciario (el cual contiene los dineros obtenidos por la venta de propiedades en la ex zona del canal, fondos que se consideran propiedad de todo el pueblo) y la creación en su lugar, de un nuevo Fondo Soberano, en el que se depositarían las supuestas ganancias del Canal de Panamá.

De acuerdo al gobierno esto se quiere realizar para poder utilizar los recursos de ambos Fondos en la financiación de un conjunto de empresas privadas , el pago de parte de la deuda pública y la realización de obras de infraestructura que faciliten la especulación con tierras

4- El incremento, como nunca antes visto, de las llamadas contrataciones directas de bienes y servicios, a través de los cuales se producen escandalosos sobreprecios en las adquisiciones públicas.

5-El establecimiento de un conjunto de reformas fiscales, guiadas a reducir la carga impositiva de los sectores de mayores ingresos, recargando el peso de los impuestos sobre los sectores medios y los de menores ingresos relativos.

La política de desmantelamiento del estado panameño practicada de manera más aguda por este gobierno, si lo comparamos con los anteriores, ha mermado de manera significativa su capacidad en solucionar o, por lo menos, revertir el creciente deterioro de los servicios sociales fundamentales, tales como la salud, educación y la provisión de agua potable. Esta situación ha provocado en los últimos tiempos el surgimiento de los mas variados frentes de confrontación, que de alguna manera crean el escenario para ir juntando fuerzas , ahora dispersas, con el fin de establecer en la sociedad panameña un nuevo pacto social, que permita la participación del pueblo y sus organizaciones en las decisiones que debemos tomar para el perfeccionamiento de nuestra liberación, social, política y económica.

En este escenario de confrontación actual ,la irrupción de los aborígenes de este país, reclamando su auto determinación y el respeto por sus derechos ancestrales y jurídicos de decidir sobre los bienes en común de su nación, ha devenido en una especie de refrescamiento de la lucha social, que ha impulsado una nueva determinación y visión del camino que debe seguir la población no indígena, EXIGIR SU DERECHO A DECIDIR SOBRE EL DESTINO DE. LOS BIENES COMUNES DE TODO EL PUEBLO: El doble Carácter del movimiento indígena en su papel de defensa de los recursos por un lado y el otro papel, que debemos potenciar, que es el de articulador del resto de los movimientos populares que han pasado por una etapa de difícil acercamiento y coordinación., crean las posibilidades de seguir avanzando por el camino de la construcción de los frentes únicos de lucha hacia la constitución de un Estado de Democracia Nacional, no excluyente y participativo, donde los trabajadores tengan un peso específico importante para la toma de decisiones En este aspecto surge para el Partido del pueblo, el partido de los comunistas panameños ,una dirección adicional en su trabajo orgánico. La articulación con otras fuerzas a través de la apelación a la ampliación de la democracia refundando el estado y protegiendo su patrimonio nacional es el camino correcto para culminar nuestro proceso de liberación nacional.

Los Estados Unidos, por ser Panamá un país muy especial en el desarrollo de su geo política hemisférica que garantice su dominio sobre el resto del continente necesita que la misma goze de estabilidad , por lo que la confrontación interna que transcurre en nuestro país y que crea inestabilidad ,no está aislada del carácter antiimperialista de la lucha del pueblo panameño y sus organizaciones. Lo que ocurre es que en las nuevas condiciones de nuestro país ,después de la firma de los Tratados Torrijos-Carter, la presencia imperialista ha tomado nuevas formas que se traducen en influir sobre las políticas de los diferentes gobiernos que se han sucedido desde la invasión, con el fin de que el movimiento popular no se pueda desarrollar ni fortalecer para que cuando sea necesaria una presencia directa y sin subterfugios, el coloso del norte pueda hacer su aparición nuevamente ,sobre todo para apuntalar la defensa de sus intereses en la región, que como es sabido de todos ,ha estado marchando en los últimos tiempos hacia la construcción de regímenes cada vez más progresistas, con propuestas y realizaciones ,que de alguna manera , nos encaminan en lo estratégico hacia el socialismo.

Siempre hemos creído que la hazaña de nuestro pueblo de expulsar al colonialismo norteamericano de nuestro suelo, la cual para muchos era imposible, por tratarse de una de las potencias más fuerte de finales del siglo pasado, no ha sido del todo valorada por nuestros amigos de lucha, sobre todo en el sub-continente latinoamericano.

Sin tratar de alargar esta ponencia solo me atrevería a decir que sin ese acontecimiento no habrían sido posible muchos de los avances del movimiento revolucionario continental. Sin embargo, para terminar,, es importante también señalar, que en la actualidad, el imperialismo norteamericano ante la crisis mundial de su sistema y las posibilidades reales de una confrontación de consecuencias impredecibles en el Medio Oriente, está reestructurando su geopolítica y retomando posiciones, que incluyen una mayor atención de sus intereses en nuestro continente, que ponen a Panamá nuevamente en la posición de ser requerida para garantizar una presencia física directa de tropas o personal militar norteamericano. En este sentido llamamos la atención a la solidaridad con la lucha de nuestro pueblo, por seguir perfeccionando su independencia, ya que por ese camino, todos los demás pueblos de Latinoamérica serán más libres, como ocurrió en el año 2000 con el cumplimiento del Tratado Torrijos- Carter.

Área de Relaciones Internacionales
Partido del Pueblo de Panamá

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